sábado, 2 de noviembre de 2013

Huanuni – bomba de tiempo

El yacimiento minero de Huanuni desde hace más de 60 años atrás ha sido considerado el más grande por la calidad y el volumen de sus reservas.

Considerando el yacimiento de carácter filoniano (existencia de la casiterita SnO2 en vetas de diferente potencia y desarrollo vertical y longitudinal) y su ley de cabeza altamente significativa, le ha permitido sobrellevar épocas muy difíciles, especialmente cuando los precios de los minerales se cotizaban por debajo del punto de equilibrio o cuando la demanda bajaba debido a la aparición de sustitutos en el uso industrial del estaño.

Trabajar en la mina Huanuni era apetecible para ingenieros, obreros y todos por su proximidad a la ciudad de Oruro. Este yacimiento se administró con visiones diferentes; por una parte explotar irresponsablemente hasta agotar reservas y dejar en chatarra lo que pudiera quedar de la infraestructura, como también explotar las reservas competitivamente y lograr excedentes económicos (ganancias) para la diversificación de la minería en el contexto nacional.

Una de las épocas que recuerdo bien fue cuando oficiaba de Subgerente de Operaciones Minero Metalúrgicas de EMSO (Empresa Minera Subsidiaria Oruro), en la que Huanuni dependía administrativamente de ésta subsidiaria (1989 – 1993), ahí se planteó que Huanuni perteneciera a las empresas núcleo de Comibol con el propósito de lograr ganancias importantes y con ello implementar un programa ambicioso de prospección y exploración en otros yacimientos con la técnica de perforación de taladros a diamantina para poder evaluar adecuadamente un eventual potencial minero.

La ley de cabeza promedio de los últimos 40 años es de 1,69% Sn, que permitió una recuperación promedio del proceso metalúrgico de 69,6%. Los referidos promedios de ley y de recuperación se obtuvieron para un tratamiento de 300.000 toneladas métricas secas de mineral anuales, ó 776 toneladas métricas secas diarias, con 750 trabajadores promedio.

Como ya se dijo anteriormente, Huanuni fue un centro minero apetecible hasta para los ladrones de minerales (jukus) que hacían su agosto todos los años de su existencia. Si revisamos la vida del yacimiento de Huanuni podremos advertir que hubieron diferentes épocas en las que se trató de tomar por asalto las cabeceras de este monumental yacimiento como fue el caso reiterado del Posokoni, que fue precisamente el último intento hace más de siete años donde cooperativistas, jukus y personas de otras regiones obligaron a las autoridades de Comibol a tomar la decisión equivocada desde todo punto de vista de aumentar la fuerza laboral a 5.000 trabajadores.

Comibol tiene sus planes de ampliar a corto plazo las instalaciones para tratar 3.000 toneladas por día, aspecto que no está en cuestión si es que se tomaron los recaudos para que la vida útil de Huanuni disminuya a su máxima expresión por el agotamiento vertiginoso de sus reservas con las consecuencias negativas para la economía del departamento de Oruro.

El año 1996 tuve la oportunidad de hacer un análisis exhaustivo del centro minero Huanuni para reformar la ingeniería conceptual del proceso metalúrgico, planteaba de introducir una etapa de preconcentración, mejorando así los resultados técnicos y económicos del proceso. Parece ser que en el nuevo proyecto se han considerado estos aspectos.

De cualquier manera, el título que le pongo al presente artículo de "Huanuni-bomba de tiempo", lo hago ante la eventualidad de que las cotizaciones de los minerales bajen (Ojalá, Dios te salve María) en el corto plazo. Si hacemos una estimación grosera en el supuesto de tratar 3.000 toneladas por día y la cotización bajara a 5 dólares/libra fina, Huanuni quiebra automáticamente si no se reduce la fuerza laboral a 2.500 trabajadores.

Para el Gobierno, que promulgó hace aproximadamente un mes la Ley de Reversión de Concesiones Mineras, sería una gran oportunidad de resolver el problema potencial que tiene Huanuni. Después de realizar un minucioso estudio de las concesiones a revertirse, debería pensar seriamente que en las concesiones revertidas se implemente un plan ambicioso de prospección y exploración para explotar nuevos yacimientos mineralógicos transfiriendo preferentemente a los 2.500 trabajadores excedentarios del Centro Minero Huanuni y de esta manera desactivar la "bomba de tiempo" que tienen las autoridades de Comibol .

¿Será posible realizar este intento a la cabeza de un Ministro que es ingeniero civil, o un gerente de Comibol - Oruro que es arquitecto?, yo solo puedo sugerir y el Gobierno actual tiene la palabra.



(*) Ingeniero Metalurgista Ex Diputado Nacional

No hay comentarios:

Publicar un comentario