Autoridades de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) están consolidando la compra de un nuevo turbo expansor para la puesta en marcha del Complejo Metalúrgico de Karachipampa, según se pudo conocer ayer a través de Mario Virreyra, ministerio de Minería y Metalurgia.
Una comisión de técnicos del complejo de Karachipampa viajó a Estados Unidos para buscar el arreglo del turbo expansor (equipo que introduce oxígeno al horno de fundición) pero recibieron la orden del ministro Virreira de buscar uno nuevo y arreglar el daño.
El objetivo es contar con un equipo de repuesto para cualquier eventualidad en el futuro por lo que la empresa que fue contactada tendrá que fabricar el equipo nuevo y reparar el dañado lo cual lleva su tiempo, de acuerdo a la versión de la institución.
Cuando se puso en marcha el plan de adecuación del complejo que trata cargas de plomo-plata y zinc se había señalado que entraría en funcionamiento el 10 de noviembre de 2012 pero fueron surgiendo dificultades que retrasaron su funcionamiento.
Tras garantizar la alimentación de la planta con los concentrados de minerales del proyecto San Cristóbal todo parecía que estaba listo para que arranque su actividad lo que llevó a que el presidente Evo Morales encendiera el horno el 3 de enero de la presente gestión.
A pocos días del encendido del horno se conoció que había una falla en el turbo expansor y no se podía encender la planta como se había pensado y comenzó la búsqueda de ese repuesto.
Desde la entidad cívica se criticó que las autoridades no cumplan sus propios pasos y se lamenta que el retraso signifique pérdida económica para el país porque los precios de los minerales siguen bajando y cuando Karachipampa opere no se tendrá los precios del pasado año cuando debió entrar en funcionamiento y la exportación de minerales metálicos superando la fase de venta de materia prima.
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