viernes, 23 de marzo de 2012

La producción minera debe buscar mejores perspectivas en el oro y estaño

La perspectiva en la explotación del oro vislumbra interesantes beneficios, toda vez que en un futuro próximo puede llegar a cotizar la onza troy (OT) a 2.000 dólares, un valor no alcanzado históricamente y que beneficiaría en gran manera a los productores del metal precioso actualmente diseminados en cooperativas auríferas, por una parte y en pocos emprendimientos del sector privado, este último que está empeñado en localizar nuevas áreas auríferas en base a planes de exploración inmediata.

Algunos expertos refieren por ejemplo que la explotación de estaño sería otra alternativa positiva para mejorar los índices de producción minera en el país, su precio si bien oscila entre los 10 y 11 dólares la libra fina (LF), tiene buenas posibilidades de subir algunos puntos, permitiendo a la estatal de Huanuni y a mineros chicos y cooperativistas mantener buenos índices de producción para mejorar a su vez el ritmo productivo de la metalúrgica de Vinto, donde se obtienen los ya reconocidos mundialmente lingotes de estaño con alta pureza.

Los reportes del Ministerio de Minería y Metalurgia, (cuyos datos consignados en una infografía los aprovechamos para ilustrar este nota) señalan que en los últimos seis años casi el cien por ciento de la producción minera del país se concentró en la producción de zinc, plomo y estaño, generando en conjunto un valor de 12.338 millones de dólares.

Otro dato del MMM refleja que el pasado año 2011 se consideró como el más positivo del último tiempo en materia de producción debido a que registró la cifra récord de 3.398 millones de dólares en exportaciones mineras, lo que representa a su vez más del 40 % de las exportaciones generales del país, como efecto de esa millonaria recaudación indudablemente que el beneficio se extendió a distritos y municipios a través de las regalías mineras y los impuestos, que por un lado generaron 164 millones y por el otro 272 millones de dólares, respectivamente lo que suma 436 millones que son resultado de las operaciones de las empresas mineras privadas, como San Cristóbal, San Vicente, Sinchi Wayra, Manquiri y Huanuni en el orden porcentual correspondiente.

Para la presente gestión (2012) se anticipan algunas inversiones importantes desde el MMM para encarar planes exploratorios en pos de identificar nuevos yacimientos disponiéndose inicialmente de 20 millones de dólares para la tarea expresa de ubicar áreas de explotación de oro, cobre, zinc, wólfram, manganeso y otros que existen en el territorio nacional.

Las perspectivas son halagüeñas para el sector de la minería, pero hay cierta incertidumbre en el sector inversionista dadas las condiciones vigentes cuando sigue en análisis el anteproyecto de una ley minera que puede traer sorpresas a tiempo de aprobarse. Mientras no sean eliminadas esas dudas se retrasan los planes mineros que fuera del sistema estatal podrían cobrar vigor para entrar en la verdadera competencia con los grandes emprendimientos de países vecinos.

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