La Empresa Minera San Cristóbal, considerada la más importante entre las privadas que operan en el país y lo hace en el departamento de Potosí, está cumpliendo con todos los requisitos exigidos por la Ley del Medio ambiente, evitando contaminar el área de sus operaciones y las comunidades próximas a ese centro de producción.
Por otra parte y para satisfacer la exigencia (vigente en la CPE) de favorecer a las comunidades y comunarios donde se ejecutan proyectos de extracción de recursos naturales, la empresa San Cristóbal tiene un 67 por ciento de personal potosino y más del 30 % corresponde a campesinos de la región que se han asimilado al trabajo minero, pues antes eran trabajadores agro ganaderos.
San Cristóbal dependiente de la Sumitomo Corporation del Japón ha incrementado la infraestructura "habitacional" a favor de los comunarios y sus familias de la zona, construyendo galpones para ganado, abrevaderos, tanques de agua, depósitos de forraje y otras instalaciones para descanso y diversión de los trabajadores. Antes de que se hiciera cargo la Sumitomo, la anterior concesionaria, una empresa de EE.UU. construyó un campamento moderno para albergar exclusivamente a su personal de plata.
La información añade que la mina San Cristóbal, la más importante de Potosí y el país, entre las privadas, se constituye actualmente en ejemplo de gestión y administración de emprendimientos mineros, además de contribuir de manera directa, vía impuestos y regalías al desarrollo del Departamento potosino y de las comunidades del entorno empresarial.
El caso de la Sumitomo puede ampliarse en cuestión de inversión en minería, no sólo en la operación actual, sino más bien en la futura operación para la explotación del litio. De todos modos puede no ser la Sumitomo, pero el avance de gestiones entre nuestro Gobierno y emisarios japoneses avanza positivamente.
Agencia Uru
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