jueves, 6 de noviembre de 2008

Crisis minera afecta a municipios y pone en riesgo obras de desarrollo

La crisis minera llegó antes de lo esperado, la expectativa era que los precios altos se mantuvieran de 10 a 20 años, ahora resta ajustar cinturones, reducir las esperanzas y alterar los proyectos en los municipios mineros, y en algunos casos hasta cerrar operaciones.

Así coinciden las principales autoridades de las alcaldías de Potosí, Colcha K, Llallagua, Uncía y Poopó, que son las directas afectadas por la caída de las cotizaciones, puesto que ésta les está afectando en sus recaudaciones públicas, lo que provoca la paralización de obras, proyectos de generación de empleo y pone en riesgo la estabilidad laboral.

Las afirmaciones fueron realizadas por los alcaldes de los cinco municipios, consultados por la Enlared-Onda Local a propósito de la caída de precios de los minerales, como el zinc, estaño y hasta el oro y la plata.

La Ley 3787 señala que el 85 por ciento de las recaudaciones mineras son para la prefectura del departamento productor y 15 por ciento se asigna al municipio donde está localizado el yacimiento, de ese total, las alcaldías deben destinar 85 por ciento a inversión pública, dando prioridad a proyectos que aminoren el impacto de la operación minera.

CRISIS SORPRENDENTE
“La crisis minera se ha presentado apenas en tres años”, lo que está afectando a la economía de la ciudad capital de departamento.

El efecto inmediato fue la reducción en más de la mitad de los mineros que trabajaban en el cerro, de 50 a 20 mil trabajadores, señaló el alcalde René Joaquino.

“Con cinco millones anuales por la actividad minera, el gobierno municipal de Potosí pudo llevar adelante la creación de una Empresa Minera Municipal”, que cuenta con un gran ingenio, “la que ahora está prácticamente paralizada”, porque ”no hay certeza que podamos lograr un beneficio para la alcaldía”, indicó la autoridad edil.

De igual manera será afectada “la explotación minera en dos y tres concesiones que tenía el municipio”, además, de “la industria de la platería y el tema de transporte relacionado a la platería también lo estamos parando”, remarcó el Alcalde potosino. En ese marco, el Programa Operativo Anual (POA) será austero para no proyectar obras que no se cumplirán.

2,5 MILLONES
Colcha K es uno de los municipios que más regalías mineras recibe, precisamente, porque en su territorio está la mina San Cristóbal, que todavía le reporta 2,5 millones de bolivianos mensuales por regalías, de acuerdo con el informe de la alcaldesa Elizabeth Cayo.

La Minera San Cristóbal extrae zinc, plata y plomo, pero por ahora “no estamos todavía sintiendo la baja de los precios de los minerales, evidentemente, el zinc y el estaño están bajando, pero la plata y plomo se están manteniendo, ojalá no vaya bajando más”, remarcó la Alcaldesa.

Si bien recibió millonarios fondos, cuando se elabore el nuevo POA se podrá establecer en qué medida se reducirán los programas para el 2009, el dato se revelará a fines de noviembre

LO ULTIMO QUE MUERE
Como lo último que muere es la esperanza, el alcalde de Llallagua, Juan Taquichiri, expresa su confianza en que el precio del estaño no siga cayendo, y por el contrario se recupere, puesto que este mineral ya le reportó 300.000 bolivianos a esta Alcaldía, destinando los recursos a obras de infraestructura, de servicios básicos, un hospital, una terminal de buses y otras que podrían quedar paralizadas.

“Hemos estado haciendo algunas obras y teníamos proyectado otras para el 2009, algo hemos visto que está mejorando, ojalá para que las obras se lleven adelante. Ahora está cundiendo el desaliento cuando vemos que no vamos a recibir esa cantidad para encarar esas obras”, puntualizó al indicar que realizarán esfuerzos para concluirlas.

La autoridad municipal señaló que una alternativa es el turismo aprovechando el laberinto de túneles y socavones que queda de la actividad minera, justamente, para que “puedan ingresar por Siglo XX y salir por Miraflores, o sea, al municipio de Uncía; eso es casi un sector de 10 a 15 kilómetros que hay que rehabilitar y dar seguridad a los turistas, para buscar otros ingresos además de la minería”, puntualizó.

PROYECTOS AFECTADOS
En el municipio de Uncía hay 1.500 cooperativistas, por lo que el comportamiento del mercado internacional preocupa, debido a que estas familias se mantienen con la venta de minerales, además, que la Alcaldía se beneficiaba con 100.000 bolivianos anualmente, para reinvertir en la misma actividad.

El alcalde de Uncía, Víctor Ossio, señaló que en ese municipio se buscan alternativas para frenar esta situación con la implementación de proyectos productivos, obras de infraestructura y otros.

En la Alcaldía de Villa Poopó, en Oruro, el ingreso por regalías mineras ascendía a 700.000 bolivianos anuales, por lo que la baja en los precios afectará a la ejecución del POA 2008, explicó el alcalde Nicanor López. Además que mucha gente trabaja en las minas como la cooperativa matriz Poopó Limitada, la empresa Sinchi Wayra, Cominur, Tiahuanacu y la Cooperativa Candelaria con la producción de zinc y estaño.

“Vamos a tener que ajustar los proyectos. Tenemos cerca la formulación del POA 2009 y vamos a tener que analizar en detalle a qué proyectos estaríamos afectando y de acuerdo a eso vamos a tener una política para que los proyectos no se retrasen y de una vez terminarlos”, subrayó López.

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